Análisis literario del capítulo 2 de "Una rosa para Emily"

El capítulo 2 comienza con una analépsis, menciona los hechos anteriores a la muerte de Emilia, permite ver una etopeya de esta, se demuestra firme ante la autoridad teniendo una actitud desafiante. Al mismo tiempo, se observa una ubicación temporal que contiene características del Realismo, se reconoce un mandato social de dicha época, donde la mujer se ve presionada a casarse con el hombre con el cual sale ("todos creímos que iba a casarse con ella").

Tras la desaparición de Homer, su prometido, Emilia pierde totalmente el contacto con la sociedad, lo que resulta una actitud misteriosa. Más adelante, se menciona la esclavitud existente en la época, pues menciona a un "criado negro", además, las actividades de este vienen acompañadas de estereotipos sexistas de la sociedad, ya que no lo creen capaz de mantener la cocina limpia, y se le echa la culpa del mal olor. Esto indica una conducta entrometida por parte del pueblo hacia la casa de Emilia. En el mismo párrafo, se establece una antítesis entre ambos lugares, donde también se hace uso de la hipérbole, de modo que se contrastan las características del pueblo y el "mundo" de los Grierson, uno es bajo y prolífico, el otro alto y poderoso, pero aún así el olor los conecta. Conjuntamente, al nombrar su casa con el apellido familiar, alude al poder de dicha familia, y la clase alta a la que pertenecen.

A continuación ocurren una serie de diálogos, donde los vecinos se quejan del mal olor que se desprende de la casa de Emilia y exigen una solución, sin embargo el juez se niega a actuar en contra de la "señorita Emilia", lo que representa el machismo existente, al igual que el respeto que impone la mujer. Tales estereotipos mencionados, permiten conocer más el pensamiento y el actuar de la época, proporcionados por el Realismo. Si bien no hubo soluciones por parte del juez, los vecinos optaron por hacerlo a escondidas, de modo que esparcieron cal, esto indica una necesidad de las personas por convivir en un ambiente óptimo.

Se presenta la figura de Emilia de manera rígida e inmóvil, y se realiza una comparación con un ídolo, de modo que permite conocer más a fondo la personalidad de Emilia, esta se demuestra con una postura firme pero también lejana. La ubicación espacial que se determina en dicho hecho es muy precisa y detallada, perteneciente el Realismo.

Luego se menciona a otro personaje, la tía de Emilia, lady Wyatt, la cual al parecer, se había vuelto loca, no obstante es utilizada para realizar una crítica hacia los Grierson, pues "se tenían en más de lo que realmente eran", indica una etopeya de soberbios.

Más adelante, se los representa en un cuadro, metáfora que aludiría al carácter inalcanzable de dicha familia. En este se observa una grafopeya de Emilia, esta posee una "esbelta figura", por lo tanto tenía muchos pretendientes. Sin embargo se opone a estos la presencia del padre, el cual posee una actitud antipática ya que le da la espalda a su hija, del mismo modo que sostiene un látigo, siendo este un signo de dominación, el padre creía que los pretendientes no estaban a la altura de su hija. Debido a esto, Emilia continuó soltera a la edad de 30 años, situación que era muy vergonzosa en esa época, por ello, la sociedad toma su estado civil como un fracaso y motivo de burla.

Ocurrida la muerte de su padre, la característica de inalcanzable de Emilia, o al menos para la sociedad, ya no existe, pues está sometida a los mismos problemas de una persona común: la pobreza y la muerte, por ende, el supuesto "ídolo" se cae, ya es como los demás. Aún así, Emilia queda en un estado de negación, donde no acepta la realidad de que ha muerto su padre, lo que sería un signo de locura, tal como su tía.

Sin embargo, de un momento a otro deja su actitud rígida y pasa a otra etapa del luto, de modo que "rompió en sollozos", es una metáfora que indica una tristeza profunda. Este capítulo indica la decadencia de Emilia.